sábado, 19 de enero de 2013

Crónica: La Trapa

Hola!
Me ha pasado una semana casi sin darme cuenta.
El pasado sábado nos levantábamos aún a oscuras y salíamos en dirección a Sant Elm mientras el sol empezaba a desperezarse coloreando suavemente el cielo.
A eso de las 9 de la mañana llegábamos, literalmente, al "Culo del mundo (nº5)" desde donde comenzaba esta excursión, la primera de este 2013. Entre risas por la simpática bienvenida, nos adentrábamos en el pinar por el "camí de Sa Trapa" y, a pesar de las buenas previsiones, el frío de la mañana nos hacía temer un día de viento como las anteriores salidas.
Poco antes de llegar a "Can Tomeví" el ojo de halcón, alias Pepi, dió con la primera especie de orquídea desde que se ha decidido a encontrarlas, fotografiarlas y registrarlas todas (las que sea capaz de encontrar) eso sí, lo más destacable no fue la orquídea sino el bailecito espontáneo con saltitos de alegría incluidos con que nos anunció el hallazgo. Menos mal que las orquídeas crecen donde es difícil que alguien nos vea...
Bueno, poco después del show del "gangnam style, versión orquídea" llegamos a un cruce de caminos donde volvió a sobrevolar la necesidad del mapa el cual, sorprendentemente, volvía a estar en el lugar equivocado en el momento equivocado. Vamos a ver madre: 1- cuando NO estás de excursión, lo dejas en la estantería. 2- cuando SÍ estás de excursión, lo pones en la mochila...aix...
Menos mal que el camino estaba bien señalizado y pudimos seguir, quitándole importancia al preocupante problema de entendimiento Pepi-mapa/mapa-Pepi.
Después de la reglamentaria parada para merendar, bajo un agradable pinar, comenzamos la subida ya acompañados por quién sería protagonista durante todo el día: la isla de Dragonera.
Las vistas sobre la pequeña isla vecina eran espectaculares, el sol ya había dado la razón a los meteorólogos aunque algunas nubes restaban color al mar y a la naturaleza. Aunque mientras más ascendíamos más gris se iba volviendo todo.
Así pues, a media mañana llegamos a la Trapa. Se trata de una antigua finca donde habitaron un grupo de monjes Trapenses. A día de hoy en lento proceso de restauración y conservación aunque se puede sentir el estilo de vida que un día tuvo este lugar en la cuidada forma de construir y modelar el entorno para adaptarse a él y no al contrario.
Desde el mirador, los bancales de siembra con forma de herradura te hacen sentir en un teatro en una obra natural con el mar y Sa Dragonera de fondo.
Bueno, en este momento se podría decir que la excursión de La Trapa ya ha acabado restando sólo el regreso, así que decidimos seguir un poco más y alargar la ruta hasta el cap "Fabioler".
Poco a poco íbamos dejando atrás el valle y la finca mientras que las nubes iban cerrándose sobre nosotros hasta que nos vimos envueltos en una niebla inesperada que aparentaba querer estropearnos las vistas desde el acantilado. Pero al parecer, la niebla no era realmente el problema, ni tampoco el cap "Fabioler" parecía ser el destino a alcanzar, sino que el motivo de esta dura subida entre las nubes era encontrar...la "fita"!! perdón LA FITA con mayúsculas. Efectivamente, de pronto llegados a un llano entre los montes, mi madre inició una búsqueda histérica del montón de piedras que, según decía, señalaba el desvío al nombrado mirador. Y así nos tuvo hasta que a lo lejos ya lo distinguimos, tal cual nos había prometido sin demasiado convencimiento. Así pues, se volvió a desatar el júbilo de la fémina como no podía ser de otro modo, con una repetición del zapateado, esta vez, versión "montón de piedras" y para colofón, ahí estaba ella encumbrándose cual cabrita. Los mofletes que lució, orgullosa sobre "su" fita, son indescriptibles.
A poco menos de 5 minutos de sendero hacia el acantilado, nos encontramos con el mirador del cap "Fabioler" que se hace considerar la distancia más alta de la isla directamente sobre el mar. A pesar de la niebla poco favorecedora para las fotos, pudimos disfrutar del agradable vértigo del lugar aunque, a mi gusto, estar ahí envuelto de las nubes que hacían imperceptible la unión entre el cielo y el mar, distinguiendo la silueta de Sa Dragonera hacía un conjunto maravillosamente íntimo y especial.
Ahora sí, llegó el momento de deshacer el camino ya que éste sería hoy, el punto más alejado de nuestra ruta. Curiosamente, durante el camino de vuelta hasta La Trapa, el cielo se fue abriendo, cuando parecía que sólo podía empeorar y volvimos a recuperar las vistas coloridas de la isla y desde la altura, fijamos la mirada en nuestro siguiente destino: la torre d'En Basset.
Teníamos la intención de llegar hasta aquel cruce de caminos que pasamos en la mañana donde se indicaba el camino a la torre pero poco antes de llegar al lugar, encontramos un camino que aparentaba llevar a la playa del mismo nombre aunque, siguiendo las indicaciones de una familia que decía regresar, por ese camino, de la torre, por allá que nos aventuramos.
No sabemos en que momento nos equivocamos o damos por hecho que nos equivocamos aunque realmente no teníamos ni idea de por donde íbamos así que lo más normal es que pasara lo que pasó. Dimos con la cala d'En Basset como no teníamos previsto, seguimos lo que parecían ser senderos entre la baja vegetación, las rocas, grava y el pinar y cuando al fin nos rendimos y decidimos volver sobre nuestros pasos, surge de la nada un sendero bien señalizado que nos anima a continuar con esta aventura. Y ahí, justo después de una larga y dura subida, dimos con el camino, digamos, normal, marcando con una enorme flecha el camino que va y el que viene y, evidentemente, desde donde salíamos nosotros no era ninguno de los dos. Aix...
Bueno, al fin y a cabo, ya había pasado todo ya que llegamos a la torre d'En Basset. Después de dejar claro quién es el joven atlético y quienes los viejetes al intentar subir a la parte superior de la torre, nos sentamos a comer bajo el sol de la tarde y frente al faro del cap de Tramuntana de Sa Dragonera.
Creo que hay un par de cosas que deberíamos plantearnos dejar en casa para las próximas excursiones:
1- las porquerías. Va en aumento y hace que después de todo, la satisfacción de un día de excursión se mezcle con el sentimiento de culpa al atiborrarnos de todo tipo de "ositos recubiertos de chocolate" y cosas por el estilo...sí, cosas en plural.
2- la navaja de muro. Primer día, primer tajo...a este paso me quedan 9 días para pasar de los dedos a las manos, mal pronóstico.
3- el termo del café. El primer trago...pasa, pero es que el último está más frío que el corazón de los políticos bufff.
Después de comer volvimos por el caminito hasta dar con el punto donde habíamos aparecido de entre la nada y, evidentemente, decidimos seguir por el camino marcado. Vale, pues o somos un poco negados, o sinceramente un cartelito no hubiera venido nada mal un poco más abajo ya que de pronto, sin saber ni cómo ni cuando, nos vimos en una especie de vertedero de escombros con forma de camino que, por supuesto, nos llevo de cabeza a la urbanización, cosa que no teníamos previsto y aunque parezca que urbanización es sinónimo de civilización y civilización lo es a su vez de "camino a casa" fue toda una odisea poner los pies sobre lo comúnmente considerado como "calle" o algo que se le parezca, así pues después de atravesar puros matojos estábamos junto a Sant Elm, del que sólo nos separaba una verja. Sí, la saltamos. Estamos hablando de unos pocos milímetros de metal entre la sucia maleza infectada y llena de escombros y una calle como es debida, era eso o arriesgarnos a otro camino improvisado que, visto que éste no era el día de nuestro "sentido de la orientación", podría habernos llevado quién sabe dónde. Así que una vez, al fin y oficialmente en Sant Elm, sólo nos separaban unas manzanas hasta llegar de nuevo, irónicamente, al "Culo del mundo nº5", evidentemente, nosotros llegábamos del nº1.


Aquí dejo el álbum de fotos, como siempre, clicar en la imagen para acceder.
Hasta la próxima
Víctor

La Trapa i cap Fabioler


Bueno, en esta ocasión hay dos gráficas debido a que se acabó la batería del móvil..., la primera es la mayor parte de la excursión hasta que nos desviamos hacia la torre d'En Basset, y la segunda es del recorrido restante
Distancia total: 13,60 km
Tiempo total: 7h
Mapa de la ruta 1r tramo, clicar al enlace

Mapa de la ruta 2º tramo, clicar al enlace
La Trapa, torre d'En Basset

Gráfica comparativa de velocidad y altitud
(Clicar en la imagen para ampliar)

(Clicar en la imagen para ampliar)

miércoles, 9 de enero de 2013

La Trapa


Hola!
Aquí llegan las primeras letras del 2013 y con ellas, la primera excursión para dar la bienvenida al nuevo año.
Ya pasado el jaleo navideño y aún con los remordimientos en forma de calorías recorriendo nuestro cuerpo y nuestra conciencia, preparamos para este sábado una ruta que, a mi personalmente, hace tiempo que tenía ganas de hacer. Hasta hoy hemos tenido unos días magníficos y espero que podamos disfrutar de las estupendas vistas que promete esta excursión aunque el madrugón para llegar a una hora decente a Sant Elm, no nos lo quita nadie...
Así que armaos de valor y dormid bien estos días que restan que el sábado será temprano y fresquito!
Saludos
Víctor 

Día, hora y lugar de partida: sábado 12 a las 7.30h en casa
Hora prevista de vuelta: sobre las 16.00h volveremos a estar en el coche
Dificultad: a pesar de no ser demasiado dura, es una excursión larga y tiene algunos tramos que serán agotadores.


Previsión meteorológica: hemos comenzado el nuevo año con unos días espectaculares en cuanto a sol y buenas temperaturas tratándose de enero, aunque parece que nos comienzan a asustar con las cotas de nieve, parece que podemos esperar un día despejado... aunque frío

(clicar en la imagen para ver ampliada)
Fotos web: fotos de internet del lugar que visitaremos para animar a la gente, NO son fotos de excursiones nuestras que ya hayamos hecho. Aquí os dejo una imagen del refugio del mirador de Dragonera y una vista de las casas de La Trapa


(clicar en la imagen para verla ampliada)
Ahí queda todo, ya sólo queda esperar hasta el fin de semana para disfrutar de la ruta.
Saludos
Víctor